Mi muerte

El día de tu llegada será el día que no te veré,
Será el día sin sentidos, sin tener más de mis días,
Será el día en que los ríos dejen de correr,
Será el día en que las flores que me cubrirán,
No tendrán olor, solo el dulce aroma amargo de la codicia.
El día de tu llegada comenzaré un largo sueño,
O quizás despierte del sueño en el que estoy.
Jamás te conoceré, cuando tu llegues yo ya no estaré,
Habré partido a una nueva vida y de ti me olvidaré.
El día de tu llegada todo será oscuridad, mis días se acabarán
Y mi sangre se secará, los días no vividos jamás llegarán
Y los rostros de mis queridos, húmedos estarán...

Cuando vuelvas a mí

Cuando vuelvas a mi, solo quedaran los tristes recuerdos de mi mente y la tuya…

Ahogado en alcohol vuelve a mi mente el nubloso dia, en que ya no estabas, solo ha pasado el recuerdo de mi condena, aun recuerdo al estúpido fiscal que me pregunto si disfrute al matarte, mi respuesta fue la mejor y todos quedan helados y perplejos al escucharla… -Claro que lo disfrute, ¿por que no habria de hacerlo? …- y le regrese la pregunta -¿Acaso usted no disfrutaría tener al amor de su vida en sus entrañas?-, el quedo estupefacto y con un gesto descompuesto lo negó -Si lo se usted que sabe de amar, y todos ustedes que saben del amor que le entregaba a mi esposa, a mi amante, a mi amiga, a mi todo… ahora esta dentro de mi y para siempre, ningún estúpido jovencito me la quitara ahora-… Pero como empezó, como termino y al fin llegar a este estado de embriaguez, si lo se la pregunta que te corroe es ¿Como?... pues esta es mi historia, si lo se el morbo es excelso y este escrito es lo que mas emana.

Disfrute de su calida humanidad antes de casarnos al tener 19 años y ser los dos universitarios, si esa etapa dorada que todo adulto estadounidense debería tener en su mente por el resto de su vida y darse cuenta que tan relevante es para nuestro futuro, aun la recuerdo rasguñando mi espalda y bajando sus manos hasta a llegar a mis nalgas y susurrar mi nombre al oído y después un gemido… Jajajajaja, aun me ruborizo al recordarlo, pero no dudo que fue lo mejor en aquel momento, después un cigarrillo y a los apuntes mal hechos de química orgánica…

Nunca pensé que después de tantos años la encontraría a los 27 años en un despacho de abogados que me tope gracias al divorcio de mi hermano, si ese maldito desgraciado golpeaba a su mujer y jamás tuvo el mas mínimo remordimiento a ello, pero no divaguemos demasiado porque al final terminare hablando de cualquier estupidez frívola, al momento de verla titubeo mi memoria que le pedía a mi razón olvidarla, no saludar y seguir, pero en su boca sensual y voluptuosa murió un seco saludo – Hola, ¿Tu eres Kenneth Thompson o me equivoco?-. Maldita sea obviamente no se equivocaba, era yo o un vago intento de mi después de algunos años, - Claro eres tú no olvido esos ojos marrones tan tiernos, pero si no has cambiado en tantos años…. ¡Oh! ¿Y qué has hecho?... Si yo soy la gerente… Jajaja que cortes te has vuelto… ¿y estas casado?... ¿Pero por que aun no tienes familia?... Vaya mira qué casualidad yo también estoy soltera… Deberíamos salir el sábado… De acuerdo a las 8 pásate por mi apartamento… Hasta entonces…-. Si todo eso retumba aun en mi cabeza, y desde ese momento lo demás es historia que deben llenar ustedes porque a mí me revuelve las vísceras y aun sigo bajo un vodka de un dólar treinta…

Teniendo una casa en un suburbio cerca de Seattle, y con un matrimonio de apenas 3 años surgió en mí un sentimiento aberrante de viajar a cualquier lugar, un sentimiento aventurero que posee todo hombre que ha vivido solo la mayor parte su vida… Obvio eso fue intrascendente por que un día que regrese del centro comercial al que acudí para comprar los enseres para una cena romántica donde le iba a proponer a la amada mis sueños que partiéramos rumbo a Argentina, después Colombia, Brasil y por qué no México, hasta que llegáramos a la vieja Europa trasandinos por Asia… Y para mi sangre hirviente de aquel momento en el que la encontré con mi hermano en el pórtico teniendo algo más que una linda plática familiar… Rompí el vidrio de la ventana tome un bate y sentí como se entumían mis manos de la fuerza que se precipito a las sienes de mi hermano… No hubo nunca vuelta atrás, solo corría sangre y sollozos de ella, la tome por el cuello y entramos por la cocina, ella no dijo palabra y yo la arrastre por la escalera hasta la recamara, para mi extraño placer no grito mientras lo hacía. La tome por el brazo y me miro con exaltación grotesca, ojos llorosos y un ardiente deseo que no pudo contener y nos revolcamos en el acto más impropio de mi vida y tal vez de la suya… Bajamos por el cuerpo de mi hermano y también en aquel lugar pecamos de manera que, yo sé bien que Dios nunca nos perdonara por aquella situación de temática sepulcral…

Viajamos por todo los lugares posibles, después de enterrar el cuerpo de mi hermano en el patio trasero, para suerte nuestra teníamos prevista una piscina en el patio trasero, así que el hoyo estaba hecho y la cancelación de la obra en exitosa cancelación, lamente no tener piscina en esa hermosa casa pero la situación lo requería…

Cumplimos nuestro itinerario de viaje como lo tenía previsto, y el viaje se volvió un recorrido de muerte, en cada poblado que llegábamos contratábamos una agraciada jovencita de piernas hermosas y labios prominentes para nuestros sádicos y tortuosos juegos de muerte o un gentil joven que les llena de placeres a las ancianas y cometíamos los pecados mas atroces de nuestras vida, pero en esos momentos de placer no importaban nuestras almas ni su futuro paradero después de nuestra efímera existencia en lo corpóreo… En realidad no nos importa si nos encontraban en el acto pleno o nos íbamos al infierno, no importaba porque éramos más que unos enamorados, éramos particularmente siniestros en nuestro modo vivir, pero tan normales que al término de nuestros flagrantes delitos comíamos en un buen restaurante de categoría mediana…

Cuando pasábamos por el paradisiaco Brasil emplazamos nuestro primer banquete, y que banquete Dios santo, nos despachamos a una pareja joven que logramos conseguir en un lugar de poca monta cerca de un muelle en alguna ciudad de la cual no recuerdo más que a aquellos sujetos que incautos no sabían de su destino en nuestras manos… Terminamos nuestro acto rutinario y ella corto un dedo del joven acercándome el cuchillo para cercenar a la muchacha que yacía a los pies de la puerta, lo tome sin restricciones atizándole un beso a mi amada en el cuello y me dirigí a la puerta del cuarto de motel que rentamos para nuestro impío acto, corte con delicada ternura la ropa de la chica y le arranque con la boca un dedo del pie… Ella seguía divirtiéndose con el cuerpo del joven copulando con cualquier parte sobresaliente del cuerpo que podía mantener erguida después de muerte mientras yo hacía lo propio con el cuerpo de la sujeta que ya había partido hacia un largo momento de este mundo vacio… Comió el falo del joven después de haberlo desmembrado de manera salvaje y yo la vi con un estridente horror en mi cara, y comprendí lo que hacíamos desde aquel día que mate a mi hermano. Si todo se agolpo en mi cabeza, la razón y la rabia partían de mi cabeza y recorrían macabramente mi cuerpo y este sin objeción algún tomo el cuerpo de la joven entre sí mismo y lloro por ella…

La estruje en mis brazos y llore como nunca en mi vida, yo había matado a tantas personas arrebatándoles su destino y su sino, y ellos sin objeción asumieron mi decisión y murieron en paz confiándome sus almas, a mí, a un personaje estúpido y poco ético que le daba igual en donde o con quien, solo quería sentir el poder de arrebatar lo más preciado que hay en el mundo, con esto pensaran que me arrepiento de todo cuanto hice pero no es verdad, no encuentro paz pero aun tampoco encuentro redención por qué no la necesito, sé que estoy maldito y podría matar cuando me plazca pero eso no cambiaria mi parada en el infierno…

Lo que paso después antes de llegar al lugar donde comenzó todo, es vertiginosamente borroso para mi memoria que desquicia a mi mente inundándola de esos dolorosos recuerdos, pero que es el vivir sin vivir feliz, ¿O acaso solo existimos para sufrir, o solo nos queda el placer de la muerte que no es anunciada y solo lleva para llevarnos a un sueño profundo lleno de incógnitas y burlonas preguntas?, vaya si que estoy desquiciado. Ja, aun recuerdo el desfigurado rostro de mi esposa cuando la mate, fue tan placentero, mi amor en su máxima expresión, se preguntaran como lo hice…

Llegamos a una cabaña cerca de Treno, por donde los románticos novios se pierden en las delicada y frías noches llenas de lujuriosas acciones, ahí en ese lugar mi retorcida mente entrego tanta pasión que mato a lo más preciado para mí y fue tan sencillo que solo lo diré con un lujo de detalle tan impresionante que llega al punto de ser violento, pero no se asuste mi querido lector he de aclarar nuevamente que fue mi mayor expresión de amor. Hicimos la rutina de siempre elegir al azar la pareja más excitante en la cercanía del hotel para parejas donde nos hospedamos y jugar a que empezamos a llamar "Nuestro acto de pasión", y fui fenomenal comenzamos con la chica de pelo castaño y la matamos de la manera muy creativa y difícil, por que meter un bate de beisbol por su boca hasta que esta quedara abierta en algún ángulo obtuso mientras su novio o lo que se que fuese ese chico de aspecto varonil sacado de alguna serie para señoritas en edad de sentir el calor de las pasiones corporales, observaba horrorizado nuestro acto compulsivo de sentirnos poderosos y transgresores de la vida de otro ser humano. Seguimos sodomizando a la chica mientras el joven atado a la silla donde mi esposa lo contuvo atándolo, lacerándolo y disfrutando de su obvia excitación de lo que yo hacía con su joven pareja, en ese instante cometimos el error fatal que la llevaría a su muerte inevitable, mato al joven de algunos intensos golpes en la nuca que se estrellaban con sonidos secos y gemidos del que sin más remedio no podía escapar a la sed de violencia de mi esposa, yo voltee a mirar la escena lleno de desordenada excitación y solté a mi presa, esta sollozante, desnuda y cansada escapo mientras copulábamos encima del cuerpo ensangrentado de nuestra víctima. No paso mucho tiempo en el que dejamos de percibir el ruido de las gotas de sangre que emanaban del cuerpo de mi objeto de placer cuando sentimos la mirada furtiva de un cazador que acecha a su presa y me sentí invalido, gélido e irónicamente en deuda con mis acciones previas al momento de mirar a la chica que se levanto y tomo la pistola que siempre ocupábamos para inmovilizar con amenazas de muerte a nuestras victimas, si en ese instante no era capaz de ver las consecuencias de lo que estaba sucediendo era porque mi mente mórbida seguía pensando en lo excitante que era la ocasión de ser por primera vez la víctima y no el victimario, así pues la chica armada con algo más que una 45mm señalo el cuerpo de su amado con la mano que aun no había tocado en mis juegos arteros y grito -¡Malditos cerdos los matare de la forma más dolorosa que se me pueda ocurrir!, ¡ Pónganse de rodillas y rueguen a Dios por sus vidas por que en este momento son mías!- . Que poesía emanaba de su boca, era sorprendente que después de tanto abuso a su garganta pudiera gesticular palabra alguna, y mi vida dependía de esa chica.

Algunos minutos después en lo que nuestra ama decidía el destino de nuestra existencia comprendí todo lo que había hecho hasta el momento y aun después que nos atado a ambos en partes complementamente distantes de la cabaña, pensaba e imaginaba el rostro lleno de placer mi mujer. ¡Oh!, Dios santo, entendí que lo que había hecho era más que un pretexto para pudrirme en el infierno, yo era desde el principio un mero objeto de placer para mí y para los demás, no podía entender por qué había pasado esto, en qué momento perdí noción de la razón y de esa voz interna a la que llaman conciencia. Todo estaba perdido y me comencé a sentir vacio y trate de escapar, ¿Por qué?, no lo sé aun me lo pregunto desde aquella lluviosa noche, yo estaba en una de las recamaras de la segunda planta de la cabaña y recordé que en la habitación contigua a donde me encontraba había algunas herramientas, que bien podrían servirme como armas para terminar lo que había empezado y matar a la chica.

Aun seguía desnudo y con ansia de escapar cuando llego la chica que me dio ropa para vestirme mientras me seguía apuntándome con el arma y necia me gritaba -¡Rápido asqueroso hijo de perra!-, termine de ponerme la ropa entonces juntos bajamos, ella lloro y señalo de nueva cuenta el cuerpo de su novio y me ordeno vestirlo, para después pedirme que lo sepultara en el bosque. Cuando nos alejamos de la cabaña cabe un hoyo profundo de aproximadamente 2 metros y lo enterré poniendo una cruz con piedras, bastante improvisado pero creativo ara ese momento, aun me sorprende como pensé en ese momento en algo tan solemne. Estuvimos ahí juntos mientras ella lloraba y me apuntaba preguntándome el por qué a ellos, yo solo me respondía y le respondía –Los eligió mi esposa–, en cuanto escucho la respuesta se desplomo dejando que su dolor la inundara y se olvidara de la delicada situación que se avecinaba. Aun recuerdo las lagrimas que rodaban por sus mejillas y como un flash mi corazón me traiciono y resolví que lo había hecho hasta entonces y después de matar a mi hermano no era, nunca fue mi propósito todo era la manipulación enfermiza de mi amor hacia una loca.

Le pedí perdón y llore como nunca lo hice, y hare en vida, la chica se contuvo y esquizofrénica me miro y me dijo que el perdón solo lo puede dar quien es libre de pecado, no comprendí en ese momento lo que quiso decir. Hice una plegaria por el descanso de aquel joven y le suplique a la chica que regresáramos a la cabaña, tenia asuntos que arreglar y solo yo podía hacerlo, a ella le dio igual, comprendió mi dolor y me llevo de nuevo a la cabaña. Al llegar le pregunte por mi esposa, ella respondió que estaba en el sótano. Bajamos y solo recuerdo que la mate a golpes.

Mi esposa, yacía en mis brazos, mi amor la mato. Mi amor la mato. Nuestro amor enfermo la mato. El sentimiento más hermoso del mundo puede también ser el más oscuro y siniestro. No me aleje de ella hasta que llego la policía, me arrestaron y me imputaron cargos de 2 homicidios en primer grado, otro cargo con agravante de índole sexual, violación y demás.

No importo mucho lo que vi, lo que hice y lo que dije, solo me importo dar amor. Si fue amor, por que cuando tu amada mía vuelvas a mi, estaremos condenados a amarnos de la misma manera que amamos a otros en distintos lugares y rincones de este mundo, retozaremos de pasión y ardiente deseo de muerte para renacer, volvernos a encontrar y una vez más poderte amar…

La plenitud…

De vuelta después de una gran ausencia… Ha qué bueno es volver a la tinta…
Bueno pues hoy les dejo el primer poema que escribi exclusivamente para mi blog… Espero les guste…

Plenitud en ti.

La plenitud en ti
Deja que mis desiertos
Se inunden con esos
Cálidos sollozos
De tu exquisita alma

Quiero introducir
Mis pensamientos
En tu mente y alimentarlos
Con tus fantasías de color

Poder empezar a
Calmar las ansias
Por manipular mí
Destino y siempre
Seguir junto a ti
Desear inconscientemente
Tus labios, tus piernas y todo de ti.
Quiero sentir tus sentimientos, que
Me estremecen en extasis y legan hasta
El más rincón mas apartado de mi cuerpo
Y deseo llorar por un beso

Pena por mi mísera
Existencia, que sin
Tú excelsa presencia
No llega más que a un
Vago intento de mi vida
Y como un paisaje
Inimaginable, hermoso
Y profundo de belleza
Exquisita, tu cuerpo
Sosiega a mi vista
Y me hace retorcer de
Deseo ardiente de
Poseerte, y entonces
Tu boca escupe una
Palabra y me enamoro
Del todo de ti

Después despierto
Y siento frio, un
Frio mortuorio y te
Siento pálida. Inconsciente
Y muerta.

No tiene dedicación, asi que son libres de usarlo si les place…
Chao…
By TATO…